He leído una gran entrada en el blog de mi amigo Miguel Luis sobre los libros electrónicos. http://dondevuelanlasaguilas.blogspot.com/2010/11/un-e-book-por-navidad.html.
Es uno de los temas estrella en mis clases de Bachillerato y he leído varios artículos sobre el futuro que nos espera con este artilugio.
¿Triunfarán los libros electrónicos? ¿Serán las editoriales de siempre las grandes perjudicadas? ¿Habrá más lectores? ¿Accederá todo el mundo a este nuevo tipo de lectura? ¿Desparecerán lso libros de papel? ¿Los grandes ilustradores? ¿Seremos los escritores los grandes perdedores? ¿Proliferará la literatura sin criba de las editoriales? ¿Aparecerán grandes autores que renovarán todo y que hasta entonces estaban frenados por el interés comercial?
Hay muchas preguntas y pocas respuestas. Lo seguro es que lo veremos en breve. ¿Cinco años?
¡Ah! Y que como siempre, los escritores, más que nunca, seguiremos creando novelas por amor la arte.
4 comentarios:
Formulas muchas preguntas, todas muy interesantes y sugerentes, pero imposibles de contestar en unas pocas líneas.
El tema da para muchas entradas de blog y para pensar despacio sobre ello.
Mientras esta tormenta digital se avecina, a los escritores solo nos queda escribir,al margen de lo que ocurra.
No somos la parte teórica, sino la práctica.
Además de los nuevos soportes que vienen, hay que pensar
en las nuevas obras literarias.
Y aquí veo mucha menos novedad, lo de siempre, en especial dentro de la llamada Literatura Infantil y juvenil.
Seguiremos hablando, imagino.
Pues no, no me atrevo a contestarlas. Como tú dices, permaneceremos en el carril bici, mientras los demás se adentran en esta nueva autopista. Pero que no nos lleven por delante. Personalmente, preferiría poder tocar siempre las páginas de un libro, hasta el día de mi muerte. Qué frío, si no.
A mí me da igual el formato. El libro electrónico proporciona muchas ventajas y es tan cálido como lo sean los ojos del lector. Lo que realmente importa, como dice Miguel Luis Sancho, es escribir nuevas obras literarias. Escribir, escribir hasta tropezarse con la idea que sostenga una gran novela. Como la próxima tuya, Julio.
He de reconocer que yo prefiero los libros físicos, estoy enamorado de ellos. Me hace ilusión poseerlos. ¿Será enfermizo?
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